PAPAS CON CAMOTES
Mi columna HOJA DE TIEMPO en Correo del 26 11 2016
PPK rechazó el maltrato a
Jaime Saavedra, su ministro de Educación heredado. Lo respaldó como Jefe de Estado en acción
política entendible ante la interpelación promovida por el fujimorismo.
Saavedra es una persona decente aunque ahora enfrente
denuncias que deben ser investigadas para lo cual se ha mostrado correctamente accesible.
Está haciendo frente a un cargamontón a todas luces incorrecto que como
denunció PPK puede ocultar “intereses no declarados”. Eso podría ser pero no hace
admisible la distorsión en que incurren quienes mezclan papas con camotes para
acallar a quienes defienden la autonomía universitaria y son atacados falsamente
por pretender tirarse abajo la reforma. No todo es dinero también hay
principios aunque pocos lo crean.
La reforma educativa en todos sus niveles es
indispensable. Nadie podría estar en contra de esta política de Estado. Pero la
Ley Universitaria 30220, como toda acción humana, es perfectible, y lo han
reconocido los mismos Saavedra y PPK. Se puede mejorar. Lo que no se puede
hacer es silenciar toda crítica atribuyéndole fines protervos o mercantilistas.
Pedir que la
SUNEDU supervise la educación con la misma autonomía con que la SBS supervisa
la banca y las finanzas, sin interferencia ni subordinación política, no es
igual a bajarse a Saavedra ni a detener la reforma universitaria. No aceptamos que
se lucre con la educación pero tampoco que existan sueldos de hambre para las
universidades públicas. O que el poder político digite lo que se hace en sus
claustros. No más falsos discursos pro calidad con maestros doctores con
sueldos de cien dólares.
Necesitamos
un debate con información, pluralismo y contraste. Solo se ha escuchado a Mora
y a Saavedra. No a docentes ni a constitucionalistas a pesar de sus
manifiestos. Lo primero, no maltratar ni mezclar. Lo segundo, escuchar a todos,
sin santificar a unos ni satanizar a otros.