¿NO HAY NADIE EN
GANA PERÚ
CON SENTIDO DEL
RIDÍCULO?
El control de calidad del trabajo de sus dirigentes
es esencial para cumplir con la dirección política de la sociedad. Si los
controles internos no funcionan se producen las "epidemias de
incompetencia" que generan situaciones caóticas en las políticas internas,
como lo estamos viendo.
Todos los partidos, tanto si están en el gobierno como
en la oposición, deben responder con líderes calificados y con una organización
interna suficiente para competir con los otros partidos. Por eso preocupan
crisis como la del Partido Popular Cristiano considerado muy serio. Y es que poder
ganar elecciones internas es un paso indispensable para estar en capacidad de
dirigir políticamente a la sociedad. Si esto no funciona llegar al gobierno es casi
imposible y menos funcionar como verdadero partido de gobierno.
En Gana Perú la "epidemia de
incompetencia" es palpable a extremos que se ven en el juego de las
candidaturas presidenciales, poniendo y retirando candidatos. No extraña que
suceda con una Presidenta puesta a dedo por ser la esposa del Presidente, sin Comisión
Política que funcione o instancia intermedia conocida. Cuando se usa la
infraestructura del Estado sin rubores y se realizan conferencias de prensa en
las que la lideresa dice y desdice respecto de las denuncias que la colocan en
la cuerda floja judicial y penal. Sin hablar de la bancada parlamentaria desgranada,
afectada de decepción, donde solo han quedado los diestros en el blindaje y en
argumentos que pocos creen. Que su Presidenta Nadine Heredia de Humala, ostente
una confianza de solo 8%, a la baja, es el indicador total de un partido de
gobierno de juguete que no puede cumplir sus funciones pero que lamentablemente
continúa afectando con efectos desastrosos al gobierno de su fundador Ollanta
Humala.