¿DIALOGO DE PAZ?
En político.pe el 24 de diciembre del 2016
La paz social se construye. En el camino se evitan las
turbulencias excesivas. Por ejemplo la cuestión de confianza hubiera sido un
grave error. Felizmente fue un bluff, para no dejar pasar la censura a Saavedra
sin dejar de hacerse el machito. El gobernante no puede ser como el camorrero
del barrio, pidiendo ojo por ojo, hasta que todos quedemos ciegos.
No se llegó a ese
extremo y se ganó la secuela positiva del espacio para el diálogo político,
sobre todo aquel que se dio entre la lideresa de la mayoría fujimorista avasallante
y atropelladora en el Congreso y el Presidente débil, sin partido de gobierno ni bancada fuertes.
El diálogo político ha sido celebrado por todos. Pero la
idea no puede ser que el fujimorismo gane en imagen y su lideresa sea vista
como la estadista equilibrada como mejor alternativa para el 2021 a cambio de
permitir a PPK un gobierno estable.
Nada de obstruccionismo pero tampoco de construir falsas
realidades. El liderazgo político y social debe ganarse con responsabilidad y
madurez. Y esto vale para el gobierno y para la oposición. Ambos deben tener en
cuenta ese antifujimorismo vigilante que ha sido clave para elegir gobierno en
las últimas y penúltimas elecciones.
Habrá que poner por delante los intereses nacionales que
de hecho están en la gobernabilidad, la estabilidad y la paz social. Ponerse de
acuerdo para que el país gane. Necesitamos un mínimo entendimiento para evitar
la confrontación permanente. Bien por reflotar el Acuerdo Nacional que sigue
teniendo en sus políticas de Estado la base para las políticas públicas
indispensables que dan como resultado natural mayor paz social y desarrollo
humano.
El problema es que dichas políticas deberían ser
vinculantes. Hasta ahora a pesar de los años, del 2002 en adelante, no lo han sido,
han quedado en el discurso político que como sabemos puede ser olvidable. Si convocamos
al Acuerdo Nacional solo para la foto será un gesto más para banalizarlo pero
si las hacemos vinculantes, desde el Congreso, obligarían a los suscriptores -que
son todos los partidos- para bregar por su aplicación y cumplimiento.
La estabilidad es indispensable para la inversión
privada. La gobernabilidad sigue siendo un ideal que deriva del entendimiento. Celebremos
si estamos en ese camino.
¡Feliz Navidad para todos!!