MÁS DESCONFIANZA
QUE
CONFIANZA
Mi columna HOJA DE TIEMPO en diario Correo el 22 de septiembre 2018
El Congreso le dio el voto de confianza al gabinete en
respaldó a las políticas del Gobierno de fortalecimiento institucional y lucha
contra la corrupción. La presión había sido fuerte. Vizcarra enfrentó el
obstruccionismo fujimorismo con la amenaza del posible cierre del Parlamento. Y
ganó. Aprobaron la confianza aunque en el largo debate se vio de todo, desde la
rabia hasta el miedo pero sobre todo las ganas de vengarse por la jugada
gobiernista. El Premier le sacó lustre a la pechada y no fue para nada
conciliador, o todo o nada, la confianza debía venir ligada a la aprobación de
las 4 propuestas y al referéndum.
El fujimorismo reveló su doble juego tanto al interior
del Parlamento como fuera de él. Hubo quienes votaron a favor de la confianza y
quienes se abstuvieron pero todos aceptaron la agenda impuesta. Keiko Fujimori
desde Arequipa hizo lo contrario atacó a Vizcarra de ocioso y manipulador, fustigó
la cuestión de confianza como cortina de humo e intento golpista, en las
antípodas de su bancada, aún de los más resistentes que solo se abstuvieron.
¿Qué se traen los fujimoristas? ¿Aceptarán el éxito de
la jugada de Vizcarra? ¿O le darán el vuelto de manera oscura y desleal como
muchos temen? Nada les sujeta a aprobar la reforma política y judicial en
octubre para llevarla a un referendo el 9 de diciembre. Solo aprobaron un texto
genérico para quitarse de encima la espada de Damocles pero no hay ninguna
obligación. Nada más que una confianza que ahora genera desconfianza.
“Aquí no hay vencedores ni vencidos. Hoy solo ha
ganado el Perú”, dijo Vizcarra en Twitter. Ojalá fuera así. No lo sabemos pues
la confrontación que Keiko rechaza en el discurso la alienta, como hemos visto
y escuchado, con la consigna y con la rabia. La telenovela continuará.
Lamentablemente no piensan en el país como tanto pregonan.