sábado, 7 de abril de 2018


PODERES AUTÓNOMOS
 Y EQUILIBRADOS

En Político.pe el 06 de abril del 2018
En el aquelarre final del gobierno de PPK el Congreso recibió su parte de responsabilidad. No todo es discurso y proclama anticorrupción, todos escuchamos los audios protagonizados por congresistas ahora en la picota. Se hablaron y dijeron cosas por las que ahora la ciudadanía enfoca un Parlamento que pretende convencernos de que solo era necesario cambiar de presidente de la República para que todo cambie en el país. No es así, las últimas encuestas dan al Congreso un 90% de desaprobación. El suelo es el límite y están muy cerca aunque no parecen tener conciencia de tan grave desprestigio. Si quieren seguir identificando inmunidad con impunidad en los graves casos que lo afectan es su problema y su grave responsabilidad.
El archivamiento de la denuncia contra Yesenia Ponce, es una pésima señal para quienes buscan presentarse como los grandes luchadores contra la corrupción. Lo peor que les puede pasar es que se vea su discurso como vacío y falso. Las infracciones de Ponce han indignado al país y la complacencia de su bancada traerá cola. Y ahora viene el desafuero de Kenji Fujimori, Guillermo Bocángel y Bienvenido Ramírez, grabados por Moises Mamani, falso valor elevado a las alturas por su heroicidad al haber emboscado y grabado a sus compañeros siendo igual que ellos, trocando votos contra la moción de vacancia del ex presidente Kuczynski por obras con rentables comisiones.
El fujimorismo cree haber ganado este sustantivo round político y que el Congreso es inmune al deterioro. Pero éste convertido en su fortín tiene una espada de Damocles si continúa  evadiendo los asuntos de fondo y tratando de imponerse como única fuerza en el país. Queremos concertación pero no subordinación del nuevo Ejecutivo al fujimorismo. La denuncia del legislador Juan Sheput de una alianza del gobierno de Martín Vizcarra con el fujimorismo y las declaraciones de Miguel Torres, afirmando que los nombres de los nuevos ministros fueron consultados a su partido, han generado justificada controversia.

Se ha denunciado igualmente un veto a los candidatos a ministros por ser antifujimoristas. Ridículo y absurdo porque no hay personaje con integridad moral, racional y coherente, que no haya denunciado, criticado y mostrado sus reservas con ese cogobierno Fujimori Montesinos de los noventa, involucrado en los peores crímenes, exacciones y corrupción.
Necesitamos diálogo pero también transparencia y respeto entre poderes que deben ser autónomos y equilibrados. Ni confrontación ni subordinación.
Y en cuanto a Ministro de Defensa, general José Huerta, firmante del acta de sujeción a Vladimiro Montesinos y asistente festivo al 53 cumpleaños del asesor, no tiene cabida en un régimen que se proclame democrático. Inadmisible su designación y más aún su permanencia. Debe renunciar para no contaminar la esperanza con que comienza Martín Vizcarra.
PD: Mi protesta contra la autorización que dio el Rector de San Marcos a la Policía para ingresar al campus universitario que es inviolable. Si hay reclamo estudiantil se debe escuchar y no permitir ni violencia ni maltratos.  No se puede satanizar a los alumnos y toca a la autoridad privilegiar el diálogo. Para eso estamos en una universidad con autonomía que debemos defender.


NI ENFRENTAMIENTO

 NI SUBORDINACION

Mi columna HOJA DE TIEMPO en Correo el 06 de abril 2018

El fujimorismo de Keiko Fujimori hizo sufrir a PPK su victoria electoral. Todo el país es testigo del bowling de los naranjas con los ministros y de la prepotencia congresal respecto de la vacancia presidencial más allá de los factores que la determinaron y del relevo oficial por el vicepresidente Martín Vizcarra.
Las aguas se han calmado, las turbulencias parecen haberse detenido y los peruanos aguardaban con impaciencia el gabinete del nuevo gobierno. Vizcarra ha prometido diálogo y concertación. El flamante Premier César Villanueva tiene capacidad para ello aunque aunque ahora se enfrente a serias acusaciones y cuestionamientos. Niega injerencia del fujimorismo en la conformación del gabinete pero hay señales inquietantes. No por gusto el vocero de  Peruanos por el KambioJuan Sheput, denunció una alianza con Fuerza Popular y los rumores son fuertes acerca de las consultas sobre los futuros ministros y el veto para que no fuera elegido ninguno que tuviera un sentimiento antifujimorista. Lamentable porque de seguro quienes rechazaron la prepotencia, abusos y crímenes del cogobierno Fujimori Montesinos están entre los ciudadanos con mayor integridad, honestidad y decencia. Y debemos defender esa discrepancia de fondo y el derecho a mantenerla aunque no caiga simpática a Fuerza Popular. Los fujimoristas quieren reescribir la historia para afirmar que son los luchadores contra la corrupción. De memoria frágil no quieren recordar los luctuosos capítulos que todos presenciamos en la funesta década de los noventa.
Bien por el diálogo pero ningún olvido debería determinar que pasemos de la confrontación a la subordinación al fujimorismo cuando necesitamos coordinación con autonomía. El nombramiento del Ministro de Defensa, por ejemplo, recaído en José Huerta, un general que firmó el acta de sujeción a Vladimiro Montesinos y que estuvo además festejando su cumpleaños 53, no puede ser admitido en un régimen democrático. La desmemoria y la permisividad no pueden llegar a ese grado.