domingo, 10 de enero de 2016


ROMPIENDO LA BURBUJA

 


Publicado en Político.pe el 9 enero 2016 

 

El Jurado Especial de Elecciones determinó en primera instancia que Ollanta Humala violó el principio de neutralidad electoral. La grita nacionalista ha sido mayúscula para exigir la rectificación por el Jurado Nacional de Elecciones. El JEE tiene razón pues la actitud presidencial de confrontación y ataques personales viene de lejos y sin propósito de enmienda. Por esto la decisión del JEE lo baja de la burbuja en que se han instalado él y su esposa, en cuyo confort creen que todo pueden hacer, que nada les es vedado ni prohibido, todo les parece permitido.

 

A pesar de que están jugando a descuentos en una gestión preocupante por el resultado de las investigaciones que están pendientes e implican a la pareja, sobre todo a Heredia que aparece mucho más complicada. Hasta el hermano mayor de los Humala ha precisado la precariedad de la situación presidencial y alertado sobre su situación desesperada. El que Humala no haya dado trámite al tratado de extradición con Francia -bajo pretexto de la necesidad de su perfeccionamiento- ha generado sospechas de fuga a un país amable y conocido como el galo. A lo que se agrega la grave noticia de las investigaciones francesas a las cuentas bancarias de Nadine Heredia. El Defensor del Pueblo también ha llamado la atención sobre la participación de la primera dama en actos oficiales toda vez que es presidenta de uno de los partidos en contienda electoral y se beneficia indebidamente de los reflectores mediáticos.

 


El JEE tiene razón, no es adecuada la forma en que Humala se refiere a los políticos en general y a los candidatos en particular denostando de ellos o presumiendo excesivamente de su gestión. La pareja de Palacio vive en una burbuja que también es arbitrariedad. Eligen sistemáticamente el espacio en que se verán favorecidos, aprovechan de todas las coyunturas, se dejan llevar por una presunta popularidad que ya no tienen y por los oropeles que siempre rodean el poder. Pero todo esto tiene límites. Ya se acaba, la burbuja revienta. A comenzar por que el Tratado que Humala se empeñó en bloquear ya fue convertido en Ley en el país de los Borbones. Y el chic francés ya no será para ellos.         


EL CHIC FRANCES



Publicado en Correo el 9 de enero 2016

Ollanta Humala no quiso promulgar el tratado de extradición con Francia cuando ya había sido aprobado por el Congreso y lo que faltaba era un trámite de rigor sin posibilidad de modificaciones. ¿Qué fue lo que no le gustó o le pareció inconveniente para sus planes y los de su esposa de recalar en ese país después de culminar su mandato? 

En el tratado se consideraban  nuevas y diversas figuras delictivas relacionadas con el lavado de activos más otros delitos de corrupción que podrían involucrarlos. Ya sabemos cuán rigurosa es la famosa policía gala. Pero a ello se ha agregado la noticia de que Francia iniciará a Nadine Heredia  una investigación de sus movimientos bancarios y bursátiles por lavado de activos. 

¡Qué tal roche¡ Los Humala han vivido en Paris y tienen múltiples contactos familiares y amicales los que ahora estarán bajo la lupa de la justicia francesa. La Oficina de Cooperación Internacional del Ministerio de Justicia de Francia investigará a Ivoska Humala, hermana del Jefe de Estado, y a la ex embajadora peruana en Francia, Cristina Velita. Poca duda queda de la coincidencia de la resistencia presidencial a promulgar el Tratado y su previsión de evitarse mayores problemas personales conyugales y familiares. 

El roche es nacional e internacional pues el presidente de la República estaría poniendo por delante sus intereses personales sobre los nacionales. La única manera de desmentirlo o aclararlo, de descartar la sospecha es que el presidente retome el trámite del Tratado a la brevedad. Sobre todo cuando Francia ya lo convirtió en Ley. Su actitud se entiende por el difícil futuro que les aguarda, en especial a la primera dama, una situación tan delicada que su hermano Ulises Humala lo ha señalado públicamente. Si la investigación nacional y la persecución arrecian Ollanta Humala, su esposa y su familia deberán ponerse a buen recaudo. La posible y conveniente fuga a Francia se torna difícil. El chic francés ya no será para ellos y el precio del roche es demasiado a pesar de contar con amigos y de haber bloqueado inútilmente el Tratado.