sábado, 12 de enero de 2019



LECCIONES TEMPRANAS 
DE LA CRISIS

Publicado en Correo el 12 de enero 2019
Se cayó la censura Daniel Salaverry por irrespeto al reglamento del Congreso. Ninguna bancada la apoyó y Fuerza Popular perdió cinco congresistas en el intento. Y se anuncia la disminución de su caudal en 15 más en las próximas semanas. Salaverry oficializó su renuncia a la bancada “naranja” pero no al partido que lo llevó al Congreso y al cargo, lo que no deja de generar incertidumbre.
Los fujimoristas y su mayoría absoluta en el Parlamento son historia. Ahora tienen 56 congresistas y van a la baja. El chubasco ha sido completo desde que Keiko Fujimori fue a prisión. El desbande no es nuevo, tiene sus antecedentes en el 2000 cuando la debacle del fujimontesinismo llevó a Alberto Fujimori a renunciar por fax. Valentín Paniagua fue entronizado como presidente constitucional con los votos que antes habían sido totalmente obsecuentes para la corrupción y la violación de derechos civiles, políticos y humanos durante la larga década de los noventa.

Los últimos acontecimientos agravan la situación del fujimorismo dada la secuela de hechos y desaciertos reprobados por la población. Las divergencias internas proliferan por lo poco que ofrecen para el futuro. Sin mencionar las aludidas razones de conciencia en la sentencia del Tribunal Constitucional respecto de la ley "antitránsfuga". El resultado es la redistribución del poder con las nuevas bancadas. La lección: la democracia necesita partidos fuertes, organizados y con ideología.

La Fiscalía post renuncia de Pedro Chávarry deja también enseñanzas. Debe ser fortalecida para prever y resolver situaciones como la sufrida. La modificación de su Ley Orgánica permitirá nuevas pautas consensuadas sin basarse necesariamente en el Proyecto del Ejecutivo.

Toca al Congreso poner un pare a los deseos de democracia plebiscitaria que llevan a la concentración política y a la indeseable eliminación del equilibrio de poderes. No olvidemos la dolorosa cátedra que en este sentido nos dejó el fujimontesinismo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario